Me levanté esta mañana y no estabas ahí. Tu recuerdo se había borrado por completo de mi mente y con él, te habías ido. Algo así como un fantasma que cruza la puerta sin destino aparente.
He buscado conciensudamente para ver si descubro algún dejo de tí en alguna parte. Pero no hay nada. Ni el más mínimo gramo de polvo, ni una minúscula pelusa de tu ropa o rastro de tu piel, aunque sea una escama microscópica que alimente parásitos alergénos. Nada.
Es más, pensé en sacar mi cerebro y desenrollarlo para ver si por ahí encontraba algo. Sólo vi algunas lesiones producto de alguna incursión con el tetrahidrocanabinol, pero de tí ni rastro. Y que quede constancia de que te busqué, pero me levanté esta mañana y no estabas ahí. Ahora sólo me queda esperar para ver si vuelves.
MIA
No hay comentarios.:
Publicar un comentario