miércoles, septiembre 20, 2006

Carcinoma Hepático del Alma


Hoy le vi, surgió como un bulto en mi hígado
La cirrosis del alcohólico que engendró abatimiento
La degeneración de un dipsómano progresivo y delirante
Que saboreó hasta provocarles borrachera a sus fiduciarios

Tengo miedo de mirarle, quizás sea como verme en el espejo
Es el pavor del recuerdo, son las noches de dormir en la angustia
Las madrugadas de pavor que disfrutamos de una herencia extática
Reminiscencias de una niñez sin niños llena de espumarajos de cerveza

Pocas veces vemos un carcinoma hepático del alma
La ecografía no logra revelarlo a los facultativos inquisidores
Los escrutinios clínicos no consiguen fotografiar las entrañas emocionales
Los galenos orgánicos no advierten a este huésped parasitario alojado a voluntad

Este cáncer no se cura con nada, es crónico
No lo verán en ningún otro lugar más que en mi hígado
La ira, el resentimiento, el miedo son sus enfermedades oportunistas

Después de ella, solo queda la miopía sentimental de tanto ver vasos vacíos

Mía